Casi un cuarto del spam que circula en el mundo proviene de los Estados Unidos, que encabeza un ranking de 12 países que finaliza con Argentina, según el análisis de una empresa de seguridad informática.

Según un reporte de la empresa SophosLab presentado esta semana, durante el segundo trimestre del año el 24,2 por ciento del spam a nivel global tuvo su origen en Estados Unidos, seguido de lejos por Francia (con el 6,7 por ciento) y China (con el 6,2 por ciento).

Se trata de un ranking que la firma actualiza cada tres meses, en el que figura el porcentaje del volumen total del correo basura por país de procedencia.

Entre abril y junio, cerrando el "Top 12" figura la Argentina, desde donde proviene el 2,4 por ciento del total. Completan la lista Italia, Rusia, Alemania, Corea del Sur, Ucrania, España, Vietnam y Japón.

Según el relevamiento, el país descendió algunos lugares en el ranking ya que entre enero y marzo había ocupado la novena posición y en el tercer trimestre de 2013, la séptima.

El caso argentino es particular por su comparativamente baja cantidad de internautas.

Distintos estudios cifran la penetración de la banda ancha en el país entre el 55,8 por ciento y el 62 por ciento, con lo que los argentinos conectados a la red son entre 22 y 25 millones aproximadamente, muy lejos de, por ejemplo, los 632 millones en China.

Pero esto no quiere decir necesariamente que los argentinos sean grandes productores de spam: muchas de los usuarios que lo envían lo hacen sin saberlo, debido a troyanos que se instalan en sus computadoras.

"La gran mayoría del spam es enviado de forma insospechada desde computadoras infectadas con malware, así que si no tiene cuidado, puede terminar siendo parte del problema antes que de la solución", explicó el informe.

Entre las razones por las que se emplea este tipo de mecanismos, SophosLab señala que para los cibercriminales enviar sus propios correos basura sería "demasiado caro y fácil de rastrear", por lo que prefieren que sean otros los que envíen el spam por ellos.

Las computadoras que sufren este tipo de infecciones se denominan "zombies" y sus dueños terminan pagando por el ancho de banda con el que se envían los mensajes y corriendo con los riesgos, sin saberlo.

Asimismo, el informe revela que el país con mayor grado de spam por habitante es Bulgaria, seguido por Bielorrusia y Suiza, en una clasificación en la que el único país sudamericano es Uruguay, en la séptima posición.

En este otro ranking, la vara para medir y comparar es el spam per cápita registrado en Estados Unidos, ya que allí está la mayor parte de la infraestructura de Internet, señala el reporte.

Así, Bulgaria registró el doble de envío de correo basura por habitante que en el país norteamericano, Bielorrusia un 190 por ciento más, Suiza un 170 por ciento más y Uruguay un 130 por ciento más.

El estudio advierte que los "cibercriminales" que acceden "desde el otro lado del mundo" a una computadora y le instalan el malware para que, cuando se le dé la orden, comience a mandar spam, también suelen pedirle otras acciones.

Entre ellas, destaca el robo de contraseñas, el espionaje de información personal para luego venderla, el engaño para generar clics en anuncios y así obtener ganancias, el posteo de "recomendaciones" en las redes sociales o el ataque desde las computadoras infectadas a sitios de terceros.

"La mayoría del spam contabilizado por SophosLab para este estudio provino de computadoras que bien pueden haber hecho una o más de esas acciones, además de enviar spam", señaló el informe.

Para evitar que una computadora sea infectada con malware y volverse parte del problema del spam, los especialistas en seguridad informática suelen recomendar que se evite cliquear los links o abrir archivos adjuntos en los mails de remitentes desconocidos, además de mantener los equipos asegurados con software antivirus.