El descubrimiento de uno de los dinosaurios más extraños del mundo tiene en vilo a la ciencia. Diego Suárez apenas tenía 7 años cuando su curiosidad por estos animales, heredada de sus padres geólogos, lo llevó a investigar y encontrar los restos fósiles de una nueva especie en las cercanías del Lago General Carrera, Aysén, en Chile. Ayer, 11 años después de ese hecho, se dio a conocer el reporte científico en la prestigiosa revista Nature.

“Se trata de uno de los dinosaurios más extraños descubierto hasta ahora”, expresó Fernando Novas, el investigador del Conicet y del Museo Argentino de Ciencias Naturales, que fue el primer autor del trabajo. El nombre científico del dinosaurio es “Chilesaurus diegosuarezi”, en referencia al país en el que fue hallado y en honor a su descubridor.

“De la nada, dos objetos pequeños aparecieron y eran fósiles”, relató Diego, quien en la actualidad tiene 18 años, al recordar que previo al gran descubrimiento había tomado prestadas las herramientas de trabajo de su mamá para escarbar un poco en la zona de piedras jurásicas.

El Chilesaurus pertenece a la raza de los terópodos, que incluye a los carnívoros como Velociraptor, Carnotaurus y Tyrannosaurus, aunque su cráneo pequeño, su pico córneo y los dientes en forma de espátula revelan que tenía una dieta completamente herbívora. Según los científicos, habría sido primo lejano del Tyranosaurus Rex que vivió 145 millones de años atrás.