"La frase 'Se puede comer de todo, pero con moderación' es considerada desde hace mucho tiempo la mejor recomendación dietética, pero carece de evidencia empírica a su favor. Nosotros queríamos estudiar la diversidad alimentaria y evaluar su relación con la salud metabólica", declara Marcia de Oliveira Otto, autora principal del reporte sobre los resultados del estudio. 

Los investigadores midieron la diversidad de la dieta de 6.814 participantes pertenecientes a diversas razas y naciones. Las características estudiadas incluyen el recuento total (el número de diferentes alimentos que se consumen en una semana), la equidad (la distribución de calorías entre alimentos consumidos) y la disimilitud (las diferencias entre los alimentos consumidos relevantes para la salud metabólica, por ejemplo, el contenido de fibra, sodio y grasas trans).

Los resultados del estudio demostraron que una mayor diversidad en la dieta no está asociada a una mejor salud metabólica y un menor peso. Aquellos participantes del estudio cuya diversidad alimentaria fue mayor, engordaron 120 por ciento más en diez años que las personas que consumían menos tipos de alimentos.