Martín Renzacci tiene 31 años y se fue de luna de miel junto a su flamante esposa a la isla australiana de Tasmania. Allí, contrajo el síndrome Guillan-Barré, debió ser hospitalizado y estuvo en coma varias semanas. Afortunadamente, tuvo una evolución favorable y está en continúa recuperación.

“Siempre me decían que mi enfermedad es muy grave pero si la peleaba podía tener un buen final. Hoy todos los días venimos avanzando”.sostuvo Renzacci.

"Hoy ya no me hago problema por cosas que no tienen importancia. Empiezo a disfrutar", destacó por Radio Continental. “Tengo otra escala de valores”, agregó.