Las nuevas tecnologías y las redes sociales potenciaron exponencialmente los riesgos sobre las víctimas del acoso escolar (bullying) ya que lo que “antes se reducía al ámbito del patio de la escuela, hoy se multiplica de una manera muy difícil de controlar”, alertó por Continental la licenciada Candelaria Irazusta, integrante de ABA (Anti Bullying Argentina).

En Magdalena Tempranísimo, relató que “es muy común que los padres se presenten en nuestra institución con hojas impresas del Facebook o de Twitter, y esto se da no sólo porque las redes son una prolongación de la vida de los jóvenes, sino además porque en estos medios se produce como un efecto de anonimato, aunque estén las firmas. Esto hace que, por ejemplo, los niños que personalmente funcionan como espectadores o testigos de bullying, en las redes también se conviertan en agresores”, lo que les da a estas una “masividad” inusitada.

“Para hablar de acoso en este ámbito se tienen que dar una serie de factores, el primero es que se da entre pares. La cronicidad es otro elemento central y lo que lo diferencia de una situación de conflicto que puede ser esporádica, es decir, el acoso escolar es una situación permanente lo que hace que la víctima vaya desgastando sus recursos”, explicó.

“También existe un desbalance de poder, ya que el acosador se siente más poderoso que la víctima, cuyo sentimiento central es la indefensión. Cuando hablamos de los riesgos que producen nos referimos a situaciones realmente graves, algo que fue descubierto este último tiempo a través de investigaciones lo que hace que, si bien siempre haya existido el acoso, recién ahora se puedan dimensionar sus efectos”, sostuvo.

En tanto, Irazusta añadió que “más allá del trabajo que se pueda realizar en forma personal con los involucrados, la comunidad educativa debe estar alerta a estas situaciones y tener un plan de acción, algo que todavía no sucede en la mayoría de las instituciones y que, en muchos casos, todavía es minimizado. Para resolver estas situaciones se debe realizar un trabajo multidimensional y se debe trabajar en la prevención capacitando a docentes, alumnos y padres acerca de qué es el bullying y las consecuencias que puede tener”, concluyó Irazusta.