La presidenta repite en sus discursos la necesidad de que los jóvenes elijan carreras relacionadas con las diferentes ingenierías, tras lo cual invitamos a uno de estos profesionales para que hable del rigor de sus tareas.

“El problema no es que se anoten sino retenerlos en la facultad”, enfatizó Marcos Actis, ingeniero y decano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata.

“La pared con la que se chocan los alumnos son las materias como matemática o química”, dijo, al relacionarlo con la decadencia de las escuelas técnicas en los años ’90. “No pasa por la capacidad o la inteligencia, sino por la ejercitación”, agregó.

En la UNLP no existe ciclo básico como en la UBA, pero sí hay un examen de ingreso.

“Los contenidos los tienen pero tal vez están olvidados; saltar de un bachillerato común es más complicado para quien quiera ingresar a ingeniería”, señaló Actis.

En los últimos diez años, aumentó “de 10 a 20 el porcentaje de mujeres que ocupan bancos en las carreras de ingeniería.

Esa cifra, sin embargo, puede llegar al 40 o 50 por ciento, en el caso de las ingenierías química o civil.

“El único problema que tiene el ingeniero argentino es que no está socializado”, subrayó Actis.