El juez federal Daniel Rafecas procesó a diez personas acusadas por la toma del Club Albariño, en Villa Lugano, ocurrida en diciembre, al considerar que el grupo llevó a cabo un “accionar criminal” cuando usurpó el lugar con el objetivo de vender los terrenos e instalar la sucursal de una bailanta.

La medida fue dictada por los delitos de usurpación y asociación ilícita. En tanto, seguirán detenidos el jefe de la organización, Guillermo Ramón ferreira, y José Luis Meza, quien tiene antecedentes penales. Los otros ocho acusados recuperaron su libertad, mientras en la causa continúan prófugas otras tres personas.

La toma del club Albariño, que linda con Ciudad Oculta, ocurrió el 13 de diciembre pasado cuando también se desarrollaba la ocupación del Parque Indoamericano.

Tras 16 días de usurpación, la toma fue levantada pacíficamente y sus ocupantes detenidos.