Un comerciante fue condenado hoy a prisión perpetua por el crimen de Solange Aguirre, una joven de la localidad bonaerense de Benavídez que en 2012 apareció enterrada y decapitada en una isla del delta de Entre Ríos, informaron fuentes judiciales.

El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de San Isidro consideró a Alejandro Reynoso (40), ex pareja de la víctima, autor de un “homicidio calificado por ensañamiento y alevosia”, mientras que absolvió a su hijo Sergio (21), el segundo imputado, que había llegado libre y con falta de mérito al debate.