El abogado defensor del automovilista detenido tras haber atropellado y matado a un adolescente y herido a otros seis, el domingo en la localidad bonaerense de Haedo, dijo que el acusado "no corría picadas" al momento del hecho, mientras que los padres del chico fallecido exigieron justicia y que el conductor siga preso. En tanto, tres de las víctimas heridas permanecían internadas en grave estado en el Hospital Güemes de dicha localidad del partido de Morón.

El abogado Marcelo Mazzeo se presentó ayer como defensor de Cuevas en la causa a cargo de los fiscales Valeria Courtade y Alejandro Jons, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de Morón, quiénes le imputan al automovilista los delitos de "homicidio simple con dolo eventual" y "lesiones graves". El letrado reveló que aún no se entrevistó con el imputado, que se negó a declarar ante la Justicia y sigue detenido, pero que ya dialogó con los padres de éste y accedió al expediente.

Consultado sobre la razón por la cual Cuevas perdió el control del Nissan, el letrado respondió: "Al ver el video, primero pasa un auto, después viene un Bora a una velocidad completamente superior a la que venía el Tiida y se ve que lo roza, lo pasa cerca o lo encierra". Además, Mazzeo señaló que, de acuerdo a lo que el imputado le alcanzó a decir a sus padres, el Nissan transitaba a unos "setenta u ochenta kilómetros por hora".

Sin embargo, por Continental, el juez de Garantías de Morón Alfredo Meade advirtió elementos que dejan claro que estaban corriendo una picada, como por ejemplo que el Bora azul que se fugó del accidente "tenía la patente de un Fiat Uno". A su vez, explicó que "la figura que el fiscal selecciona se basa en que era inevitable que conducir así el vehículo causara lo que causó, por eso es homicidio simple con dolo eventual", explicó por Continental el juez Alfredo Meade.