Una joven declaró hoy que fue atacada por Lucas Azcona, detenido como autor del crimen de la estudiante chilena Nicole Sessarego Borquez, cuando caminaba con su bebé por la localidad bonaerense de San Francisco Solano, y recordó que la manoseó, quiso quitarle al niño y le produjo un corte en el cuello cuando se resistió.

La testigo, identificada como Milagros, contó ante el juez de Instrucción porteño Luis Zelaya, a cargo de la causa por el crimen de Nicole, que el hecho ocurrió el 1 de agosto, cuando caminaba cerca de su casa de esa localidad del partido de Quilmes con su bebé de seis meses en brazos.

Según contó uno de los abogados de la familia de la estudiante chilena, Julio Cisterna, Milagros relató al juez que en su caso el ataque del que fue víctima tuvo una motivación sexual.

Según la víctima, el agresor comenzó a seguirla y, al alcanzarla, la tocó en sus partes íntimas y hasta le hizo subir el cuello para manosearla.

Luego, intentó llevarla a un lugar mas oscuro y le pidió a Milagros que le diera al bebé, a lo que ella se negó, contó el letrado.
En ese momento, el atacante le produjo un corte en el cuello con un arma blanca que llevaba encima, tras lo cual escapó.

Milagros dijo que a raíz del corte debió ser asistida en un hospital, donde recibió varios puntos de sutura, y que allí mismo radicó la denuncia de lo sucedido.

La testigo recordó que tras el suceso volvió a ver al agresor en la calle en dos oportunidades, que siempre estaba vestido de negro y que una vez lo vio con un pañuelo que le cubría la cabeza.

Precisó que en una oportunidad viajó con él en un colectivo y que la miraba y se le "reía en la cara".

Por último, dijo Cisterna, la testigo dijo que reconoció a Azcona primero en imágenes de las cámaras de seguridad incorporadas a la causa por el crimen de Nicole y luego cuando difundieron en la televisión su rostro al momento de ser trasladado tras su arresto.