Diez personas acusadas de integrar una banda criminal que cometía robos en la Zona Oeste del Conurbano fueron detenidas en el marco de la investigación por el homicidio de un chofer de una línea de colectivos asesinado en noviembre pasado durante un asalto a su casa de Morón.

La clave para esclarecer el hecho y atrapar a los acusados es que se dejaron olvidada en la escena del crimen una pistola, de la que los peritos extrajeron huellas dactilares y un ADN.

En 15 allanamientos realizados por personal de la DDI de Morón fueron apresados 10 sospechosos de integrar el grupo criminal que el 1 de noviembre pasado mató al chofer de la línea 216 Roberto Castillo (54) en un asalto a su casa de Bonifacio al 3800. Los allanamientos se realizaron en viviendas de José León Suárez, San Martín, Villa Ballester, Moreno, Villa Maipú, Villa Concepción, San Ignacio Loyola y Castelar Sur, donde irrumpieron efectivos del área de seguridad e investigaciones de esas zonas, con apoyo del Grupo Halcón.

Durante el operativo la policía secuestró tres armas de fuego, más de 69 mil pesos, un auto y equipos de comunicaciones.

El crimen del colectivero fue cometido la tarde del 1 de noviembre, cuando tres hombres y una mujer redujeron a los propietarios de una casa situada en José Bonifacio al 3800, Mercedes del Valle Ríos (66) y el colectivero Castillo. Ante la resistencia del hombre a ser asaltado, los delincuentes le efectuaron tres disparos que le ocasionaron la muerte.

Los pesquisas le atribuyen a la banda más hechos de robo cometidos en la zona oeste, aunque por el momento están detenidos por el crimen del chofer a disposición del fiscal que interviene en esa causa.