"Mi hijo es una bestia, la droga lo arruinó", expresó con dolor por lo ocurrido Omar Dogliotti, padre del hombre que puso a su beba de apenas un año y medio en el lavarropas tras discutir y pegarle a su mujer.

El hombre, que realiza fletes con una camioneta, se levanta a las 6.30 de la mañana para poder mantener a su familia. En ese contexto, expresó: "Soy un trabajador que me mato desde siempre, y eso le quise enseñar a mi hijo, pero él es distinto, es una bestia".

Omar relató en un breve intercambio con Clarín que la casa donde tuvo lugar el episodio fue un préstamo de él a su hijo para que pueda llevar una vida mejor luego de haber estado 10 años preso. "Ya no sé más que hacer. Es un dolor muy grande el que tengo", reconoció.

EL CASO

Un hombre de 33 años, con antecedentes penales, golpeó a su mujer de 23, y al ver que su hija de un año y dos meses se había despertado por el ruido de los cachetazos, la tomó de las piernas y la sumergió varias veces en el lavarropas que estaba en funcionamiento lleno de agua. La pequeña sufrió golpes en su cabeza, pero pudo ser rescatada por su madre que tras envolverla en una frazada se escapó de la casa y la llevó al hospital Presidente Perón.

El hecho ocurrió anteayer en Quilmes. La beba después fue trasladada al Hospital Garrahan, donde ingresó en la unidad de terapia intensiva con un edema pulmonar y hematomas, pero en la tarde de ayer se recuperó y pasó a una sala común, donde se recupera. El hombre que protagonizó el aberrante hecho fue identificado por fuentes policiales y judiciales como Lucas Dogliotti, que estuvo preso y que tiene cinco causas, entre las que se destacan lesiones, amenazas, robo y resistencia a la autoridad.

El fiscal del caso, Alejandro Ruggeri, le tomó indagatoria a Dogliotti, que habría dicho: "Yo no fui". Está acusado de homicidio en grado de tentativa.