Durante la noche de este jueves, un ladrón que ya habría sido detenido ingresó a un locutorioubicado a pocas cuadras de la Basílica. Primero, simuló ser un cliente y, después, apuntó al joven que atendía el comercio.

Pidió la recaudación y esperó que Agustín Cantello, el empleado del lugar, se la diera. Luego, le disparó un balazo que le provocó la muerte. 
 
Según confirmaron a Infobae en la Comisaría 1°, el principal sospechoso del homicidio es menor y está detenido.