Priscila Hartman, de 22 años, la joven que era buscada desde que el jueves pasado cuando desapareció tras salir en moto de su casa en Paraná, fue hallada muerta horas después de la detención de un chico de 19 años, que estaría involucrado en el hecho.

El subjefe de la Policía de Entre Ríos, comisario general Juan Ramón Rosatelli, quien encabezó el rastrillaje con trescientos
efectivos, informó que el cuerpo fue encontrado en un monte espeso en la zona de San Benito, localidad próxima a la capital provincial, y precisó que los médicos forenses trabajan para establecer las causas de la muerte. Además, se supo que en el lugar de densa vegetación se encontraron huellas de una moto y que el cuerpo fue arrastrado hacia la zona.

Previamente había sido detenido Facundo Bresan, residente en San Benito, luego de que la Policía encontrara en su poder el celular y el casco que Hartman usaba en su moto. Fuentes policiales agregaron que la víctima lo habría conocido al sospechoso.

Revelaron asimismo que el apresado no había dicho nada en torno del paradero de Hartman, luego de quedar detenido por "privación ilegítima de la libertad". Su madre le entregó a la Policía efectos personales de la chica.

Carina Hartman, la madre de Priscila, relató que su hija salió alrededor de las 22.30 del jueves de su casa y le dijo que regresaría temprano. Priscila Hartman trabajaba en un local de fotocopiadoras de su tío y recientemente había entregado un curriculum para ingresar al Ejército. "Se la está buscando con vida", había declarado unas horas antes de encontrarse el cuerpo el fiscal Juan Malvasio, quien agregó que "lo que suponíamos era un testigo, terminó siendo un imputado".

Familiares y amigos de la joven habían realizado una marcha antenoche en Plaza Alberdi, junto al monumento a los Bomberos, para reclamar por su aparición, con afiches con la foto y el mensaje "te estamos buscando".

Priscila Ailén Hartman, de 22 años, vestía una remera negra con la leyenda "HOPE" en letras doradas, jeans desgastados, una camperita marrón con corazones, calzaba botitas negras y circulaba en un moto Honda Bross de 125 centímetros cúbicos color roja.

Hace diez años, la misma localidad de San Benito se conmocionó por la desaparición de María Fernanda Aguirre, una adolescente de 13 años que no ha sido encontrada.