La pareja que fue filmada en el lugar -a la que se apuntó desde un primer momento por el delito de abandono de persona- se acercó este lunes al hospital Santojanni, afirmando que son los que se quedaron registrados en las filmaciones, pero que la mujer no dio a luz en el baño, ya que no estaba embarazada. Tras ello, la policia los detuvo, y mañana les realizarán estudios de ADN para determinar sin son los padres de la menor.

En un breve contacto con el canal C5N, el joven de rastas que fue filmado por las cámaras de seguridad aseguró que es él a quien se ve comprando toallitas femeninas en la estación de servicio, con una nena de unos 7 años que luego las llevó al baño. En el interior estaba su madre.

Esta secuencia quedó registrada y era la principal pista del caso, para determinar quién abandonó a la beba. Mientras tanto, el fiscal Carlos Vasser convocó hoy a testigos presenciales, para intentar identicar a la persona que dejó a la recién nacida en el baño, en el interior de una bolsa de residuos con el cordón umbilical sin cortar y síntomas de hipotermia.

Según contaron los empleados de la estación, el domingo cerca de las 17, "un muchacho entró diciendo que era una emergencia y pidió toallitas. Más tarde, cerca de las 18 una señora avisa que el baño estaba lleno de sangre. La señora encargada de limpiar entró y descubrió una bolsa cerrada con un nudo".

La encargada de la estación de servicio tomó la bolsa y clientes observaron que algo se movía en su interior, y al abrirla hallaron a la beba "toda ensangrentada, azulada y cubierta de basura". Los empleados de la estación de servicio cubrieron a la beba con una remera y otras prendas para darle calor y llamaron a la ambulancia del Same, cuyo personal cortó el cordón umbilical y trasladó a la niña recién nacida al sector de terapia intensiva del Hospital Santojanni.

"Lo primero que hice fue abrazarla y ver si respiraba. Al principio no lloraba. Cuando los médicos le cortaron el cordón, pegó el grito y me quedé más tranquila", dijo a la prensa la encargada de la estación de servicio, de nombre Natalia.

La beba fue llamada Faustina por las enfermeras del hospital y pesó cerca de 3 kilos. Se encuentra compensada y muestra una buena evolución.