Una banda integrada por al menos doce personas, entre ellas cuatro argentinos, cayó en España por traficar metanfetamina en Japón oculta en bombones.

La Policía desarticuló la banda, comandada por nigerianos, en una operación que se desarrolló en Madrid, Barcelona y Murcia. 

La mayoría de los integrantes de la organización eran estadounidenses y europeos.

Según se supo, transportaban entre tres y cinco kilos de estupefacientes en cada viaje que realizaban desde España a Japón.

Las investigaciones se iniciaron al detectarse en Madrid la presencia de un grupo de nigerianos cuyos integrantes podían estar traficando metanfetamina producida en su país.

Según se supo, el sistema empleado para trasladar la droga consistía en captar a ciudadanos de Estados Unidos y de Europa, para utilizarlos como "narco-correos" ,debido a que los requisitos y los controles para su entrada en Japón son menos exhaustivos. 

El rol de los argentinos era reclutar a personas con una situación económica precaria en centros de asistencia social y en oficinas de empleo.