El Tribunal Oral en lo Criminal 10 de Lomas de Zamora da a conocer este miércoles el veredicto en el juicio que se realiza a un policía bonaerense por el homicidio del jugador de Banfield Lautaro Bugatto, quien murió baleado al quedar en medio de un asalto a un policía en Burzaco en el 2012.

La audiencia se realiza en el edificio situado en Larroque y Camino Negro, de Banfield, y está encabezada por los jueces Daniel Manzini, Susana Silvestrini y José Ignacio Polizza. La última audiencia se realizó el jueves, cuando el imputado, el policía, David Ramón Benítez, sostuvo en sus "últimas palabras": "Mi intención no fue lastimar a nadie, simplemente repelí una agresión ilegítima. Cumplí con mi deber".

En los alegatos del juicio, el fiscal Jorge Bettini Sansoni pidió 12 años de prisión para el policía por el delito de "homicidio simple agravado por uso de arma". En tanto, el abogado de la familia de la víctima, Lucio de la Rosa, 20 años, mientras que el defensor del policía, Juan Carlos Feustel, la absolución al considerar que actuó bajo legítima defensa. 

Además, tanto la fiscalía como el particular damnificado reclamaron que Benítez sea detenido en caso de recaer condena porque consideraron que, como actualmente está en libertad, existe riesgo de que se fugue. También requirieron que se investigue por falso testimonio a la esposa y la hermana del imputado, presentes al momento en que Benítez le disparó a Bugatto y quienes intentaron beneficiarlo con su declaración.

La hermana del policía declaró que vio una foto de Bugatto en Internet y que fue él quien le apuntó con un arma para robarle la moto. El hecho ocurrió durante la madrugada del 6 de mayo de 2012, cuando el policía Benítez, que estaba franco de servicio y vestía de civil, circulaba a bordo de un Renault 12 junto a su esposa por el cruce de avenida Monteverde y Pedro Goyena, de Burzaco, partido bonaerense de Almirante Brown. 

Delante de su auto iban su hija menor de edad y su hermana en un ciclomotor. Según la acusación, dos delincuentes quisieron robar la moto, por lo que el policía se identificó y efectuó varios disparos con su arma reglamentaria hacia los asaltantes, que de acuerdo con los testigos no dispararon. Según declararon amigos de Bugatto que se encontraban con él en la puerta de la casa para ir a bailar, el policía efectuó siete disparos "a mansalva" y "en zig zag", uno de los cuales le pegó a Lautaro en la espalda. El futbolista fue cargado en un auto y llevado hasta la clínica Burzaco, donde murió.