El fiscal de Cañuelas Rodolfo Robatto solicitó la prisión preventiva para los dos detenidos por el doble crimen de los hermanos Marcelo y Leonardo Massa, dueños de un supermercado de esa ciudad, y consideró que el móvil fue un robo y no una venganza, informaron fuentes judiciales.

En tanto, Fernando Marconi, uno de los detenidos, aseguró en una entrevista televisiva que es inocente y aseguró que nunca amenazó, no mató, ni mandó a matar a los hermanos.

En su pedido ante el juez de Garantías de La Plata Guillermo Atencio, el fiscal Robatto imputó a Daniel Ignacio "Luli" Chavero (28) y a Marconi (36) del delito de "doble homicidio calificado criminis causa", es decir matar para ocultar otro delito, en este caso el intento de robo, y lograr la impunidad, y al segundo también lo acusó por "portación ilegal de arma de guerra".

Por Radio Continental la intendenta de Cañuelas Marisa Fassi, dijo que "el caso está esclarecido".

"Es muy doloroso, perdimos a dos trabajadores de Cañuelas, pero se hizo justicia", sostuvo.

“Se hizo justicia están presos los autores pero el dolor sigue”, agregó.