Un gigantesco jet de Air France retornó hoy a París tras sufrir intensas turbulencias que dejaron cuatro miembros de la tripulación con heridas.
 
El Airbus A380 con 484 pasajeros a bordo había despegado hoy del aeropuerto Charles de Gaulle hacia Nueva York, según indicó la aerolínea francesa.
 
Al comienzo del viaje, con una clara visibilidad, hubo fuertes e inesperadas turbulencias, que hicieron que cuatro de los 21 tripulantes resultaran heridos.
 
Ambos pilotos del vuelo AF006 decidieron retornar y volvieron a aterrizar en la capital francesa. A su llegada, los ocupantes del
avión recibieron atención médica. 
 
Esta noche 180 pasajeros pudieron tomar otros vuelos hacia Nueva York, mientras que los restantes viajarán el miércoles en otras
aeronaves.