El atentado tuvo lugar a primera hora de la tarde en la localidad de Shikarpur, poco después de finalizar los rezos del viernes, el día sagrado de los musulmanes, afirmó Mir Ghayaz, agente de la Policía local.

Ghayaz confirmó que el número de muertos se elevó a 33 y a 54 el de heridos, varios de ellos graves, que salían de la imambargah, una mezquita chiita, tras la oración del viernes.

Según el canal local Express, la organización Jundullah, vinculada a Al Qaeda, reivindicó la responsabilidad del atentado, dirigido contra la comunidad chiita.

Un jefe policial de Shikarpur indicó al mismo medio que un hombre sin identificar dejó los explosivos en una bolsa dentro de la imambargah y se marchó del lugar.

Agregó que el techo del centro de rezo se derrumbó con la explosión y muchos de los fieles quedaron atrapados bajo los escombros.

La oficina de información del Ejército anunció a través de un comunicado que ha enviado hasta el lugar del atentado cuatro
ambulancias y varios médicos militares para ayudar en las labores de rescate.

El primer ministro de Pakistán, Nawaz Sharif, condenó el atentado y las autoridades locales reclamaron una investigación en profundidad sobre lo sucedido.

Mohammed Amin Shaheedi, líder del partido chiita Majlis Wahdat Muslimeen (MWM), anunció tres días de luto y criticó al gobierno central por no no haber podido evitar el atentado.

Los atentados de carácter sectario en Pakistán, en especial contra la minoría chiita (un 20% de la población del país), se han incrementado en los últimos años en medio del recrudecimiento general de la violencia terrorista desde finales de 2012.

El pasado 10 de enero al menos cinco personas murieron y 18 resultaron heridas en un atentado con bomba frente a otra mezquita chiita en Rawalpindi, localidad próxima a la capital Islamabad.

En junio de 2013, un atentado en Quetta (oeste) cerca de un centro de rezo causó la muerte a 30 personas y heridas a otras 60, mientras que a principios de 2014, tres matanzas en barrios chiitas de las ciudades de Quetta y Karachi (sur) causaron más de 250 muertos.