El proceso legislativo de liquidación de la aerolínea uruguaya Pluna se completó al sancionar la Cámara de Diputados el proyecto de ley elaborado por el gobierno y pasar los antecedentes de la crisis a la justicia ordinaria.

El debate legislativo en esa cámara duró unas 17 horas y culminó en la madrugada de hoy con el respaldo del oficialista Frente Amplio (FA) y el rechazo de la oposición que reclamó, sin resultados, la formación de una comisión investigadora.

La izquierda optó por enviar los antecedentes directamente a la justicia, lo que también deberá ser resuelto por el congreso, donde no prosperó una iniciativa de la oposición para formar una comisión investigadora.

El vicepresidente del país y presidente del congreso, senador Danilo Astori, hizo pública hoy, en pleno debate legislativo, una carta en la que asume sus responsabilidades en el proceso de quiebre de la aerolínea y admite que se equivocó cuando optó por ese camino, siendo ministro de Economía de la anterior administración del presidente Tabaré Vázquez (2005-2010).

Explicó que "era difícil para el primer gobierno de izquierda afrontar la dura alternativa" que debió enfrentarse en el año 2007 y que era "cerrar Pluna o seguir quemando decenas de millones de dólares al año, con gestión estatal" cuando el país salía de "la peor crisis" de la historia contemporánea.

Coincidiendo con la oposición Astori apuntó sus críticas a la empresa Leadgate, el socio mayoritario, cuya gestión "no fue la que el país esperaba y necesitaba" y que dejó una deuda de varios millones de dólares que el Estado uruguayo debe asumir.

"Cuando podamos hacer un balance sereno, que incluya la consideración de toda la historia de Pluna, la comparación de esta situación con otras que se vivieron en el pasado, y la experiencia internacional que nos muestra 56 compañías aéreas quebradas durante los últimos cinco años, estaremos en condiciones de extraer conclusiones serias, rigurosas y constructivas, en línea con el interés nacional", expresó Astori.

El 9 julio el gobierno uruguayo anunció formalmente la liquidación de Pluna y ofreció negociar las frecuencias y subastar siete aviones Bombardier de la compañía.