os manifestantes murieron en el barrio oriental de Matariya cuando participaban de una de las protestas convocadas por el Frente Salafista y apoyadas por la Hermandad Musulmana, el movimiento del ex presidente Mohamed Mursi, derrocado el año pasado por el Ejército, informó una fuente de seguridad.

La fuente no ofreció detalles sobre la muerte de los manifestantes, pero el ilegalizado Partido Libertad y Justicia, brazo político de los Hermandad, dijo en su perfil en Facebook que la policía abrió fuego contra la marcha en Matariya.

En tanto, el Ejército informó en un comunicado publicado en la agencia de noticias estatal Mena que dos coroneles murieron baleados por hombres que dispararon desde autos en movimiento y sin patente en hechos separados ocurridos a la madrugada.

Uno de los coroneles fue asesinado en el este de El Cairo, mientras que el otro en la zona de Abu Zabal, en la provincia de Qaliubiya, al norte de la capital, donde además hubo dos soldados heridos.

Las manifestaciones fueron convocadas por el Frente Salafista con el objetivo de "izar la bandera de la identidad islámica en Egipto, rechazar la dominación extranjera y derrocar el gobierno de los militares", que encabeza el presidente Abdel Fatah al Sisi, líder del golpe contra Mursi.

El Frente Salafista es una agrupación de varios predicadores y pequeños grupos islamistas que adopta una ideología radical y lucha por aplicar de forma rigurosa la sharia (ley islámica), aunque no defiende abiertamente el uso de la violencia para lograr este fin.

La Hermandad Musulmana, que se unió a esta convocatoria, participó junto al Frente Salafista en las diferentes protestas que se produjeron en el país contra la destitución de Mursi mediante un golpe de Estado el 3 de julio de 2013.

Las fuerzas de seguridad y el Ejército egipcio desplegaron fuertes medidas para proteger las calles y plazas de las principales ciudades ante la convocatoria de estas protestas.

Además, fueron detenidos esta madrugada 105 miembros de la Hermandad, declarada grupo "terrorista" por el gobierno egipcio, en las ciudades de El Cairo y Minia, en el sur del país, informó la agencia Mena.

Los arrestados en El Cairo están acusados de incitar a la violencia y planear disturbios en distintas provincias del país durante las manifestaciones previstas para hoy, y los de Minia de irrumpir en instituciones públicas y de la Policía.