Al menos 132 presos se fugaron a través de un túnel de un penal en la ciudad de Piedras Negras, frontera con Estados Unidos, informó el secretario de Seguridad Pública del norteño estado mexicano de Coahuila, Jorge Luis Morán.

Según las primeras investigaciones, los reos hicieron en el área de carpintería un túnel de más de 30 metro de largos y de una profundidad de más de 3 metros para poder evadir el muro perimetral y salir al patio exterior, donde rompieron una malla metálica para huir.

Por la fuga, fueron detenidos provisionalmente el director del Centro de Readaptación Social de Piedras Negras, 27 custodios, un jefe de turno y un jefe de vigilancia para ser investigados. En la cárcel estaban recluidas 734 personas, 164 de ellas del fuero federal.

Esta fue una de las fugas más importantes de cárceles mexicanas, y la segunda mayor en cinco años después de la registrada el 17 de diciembre de 2010 en un penal de Nuevo Laredo, nororiental estado de Tamaulipas, de donde se evadieron 141 internos.

Las autoridades mexicanas ya pidieron apoyo a Estados Unidos para tratar de ubicar y capturar a los fugados y el Gobierno estatal ofrece una recompensa de 200.000 pesos (15.600 dólares) por cada uno de ellos.