Algo más de 40.500 españoles emigraron al extranjero en el primer semestre de este 2012, en su mayoría empujados por la grave crisis económica que atraviesa el país, según estimaciones publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La cifra concreta (40.625) representa casi el doble del número de españoles que abandonó el país en el mismo periodo del 2011.
Según estimaciones del INE, entre enero y junio de 2012 emigraron 269.515 personas, de las cuales 228.890 eran inmigrantes que había llegado a España antes.
Entre los principales destinos elegidos tanto por los españoles como por los extranjeros se encuentran, dentro de Europa, Gran Bretaña, Alemania, Francia y Suiza. De los que se dirigieron a América, muchos decidieron ir a Estados Unidos, Ecuador, Venezuela, y Argentina.
Pese al agravamiento de la crisis económica y a que la búsqueda oportunidades laborales obliga a los españoles a emigrar, los extranjeros siguen llegando al país, aunque en proporción menor a tiempos anteriores.
Según el INE, en el primer semestre del 2012, llegaron a España 178.021 inmigrantes, frente a los 203.624 que lo hicieron en 2011.
Desde el año pasado son más las personas que salen de España que las que llegan al país para vivir, con lo que el país ha pasado de ser un destino de inmigración a ser un origen de emigración.
El negro panorama económico y una tasa de desempleo que ya alcanzó en el primer trimestre de este año el 24,44 por ciento, con más de 5,6 millones de desempleados, hicieron que España registrara el año pasado su primer saldo migratorio negativo desde que se tienen datos, con un total de 50.090 personas.