A un día de que culmine una tregua de cinco días que fue respetada por ambas partes, las delegaciones palestina e israelí reanudaron las conversaciones que durarán hasta mañana, en las que negociarán la iniciativa egipcia.

El Cairo propone el fin de las hostilidades y negociar después la apertura de fronteras, del puerto y del aeropuerto, iniciativa apoyada por el presidente palestino, Mahmud Abbas, pero rechazada por el movimiento islamista Hamas, que gobierna Gaza, que reclama el desbloqueo del territorio al que somete Israel desde 2007.

El primer ministro israelí­, Benjamin Netanyahu, destacó que solo aceptará un alto el fuego permanente en Gaza cuando "todos los intereses de seguridad de Israel se cumplan".

A la salida del habitual Consejo de Ministro de los domingos, el premier israelí afirmó que "si Hamas piensa que puede encubrir su derrota militar con una victoria polí­tica, está en un error. Yerra al creer que con una lluvia de cohetes va a conseguir rendirnos".

"La delegación en El Cairo trabaja con la orden de defender los intereses de seguridad israelí­es. Solo si nuestras necesidades de seguridad se cumplen, estarí­amos dispuestos aceptar el alto el fuego", agregó Netanyahu, citado por la agencia de noticia EFE.

En declaraciones a la agencia Wafa, Abbas destacó que la propuesta egipcia es la única posibilidad para solucionar la crisis y remarcó que lo más importante es el cese de los combates, el derramamiento de sangre y la destrucción en la franja.

El jefe del equipo negociador palestino, Azam al Ahmed, dijo hoy a la prensa tras reunirse con responsables de la Inteligencia egipcia que "no aceptará un acuerdo débil" con los israelí­es.

"Cualquier acuerdo debe cumplir las demandas del pueblo palestino, principalmente la detención de la agresión, y el inicio de la reconstrucción de Gaza y el levantamiento total del bloqueo", agregó en declaraciones recogidas por la agencia palestina Wafa.

Hamas aceptó la actual tregua durante las negociaciones pero adviritó que no habrá una prórroga de la misma sin que se reconozcan los derechos del pueblo palestino.

En las últimas dos semanas, ambas partes acordaron dos treguas humanitarias de 72 horas, renovadas el jueves pasado por 120 horas más para continuar los debates sobre los términos de un acuerdo que ponga fin a los enfrentamientos.

El movimiento islamista exige el levantamiento del bloqueo económico y el asedio militar que Israel impone desde hace siete años en Gaza, así como la apertura del paso fronterizo con Egipto y el corredor con Cisjordania.

Estas exigencias son respaldadas el resto de las facciones palestinas, incluido el partido Al Fatah de Abbas, y apoyadas por gran parte de la comunidad internacional.

Israel exige, por su parte, la desmilitarización de la franja, condición también apoyada internacionalmente.

Desde que comenzó la ofensiva israelí sobre Gaza el 8 de julio pasado, fallecieron 2.016 personas, la mayorí­a de ellos civiles, incluidos 541 niños, 250 mujeres y 95 ancianos, según los últimos datos dinfundidos hoy por el portavoz del Ministerio de Sanidad de Gaza, Ashraf Al Qedra, en un comunicado de prensa.

Por el lanzamiento de cohetes palestinos fallecieron 64 soldados israelíes y tres civiles, en el marco de la ofensiva más letal de las tres que lanzó Israel sobre Gaza desde 2007.