El informe, que vuelca en Hamas toda la responsabilidad del conflicto armado que tuvo lugar entre julio y agosto de 2014, busca disipar la esperada presión diplomática y críticas internacionales por la inminente publicación de las conclusiones de una comisión creada por el Consejo de Derechos Humanos, que se espera para el lunes.
Israel defendió su conducta al asegurar que ésta fue "legal y "legítima".

El informe afirma además que el ejército israelí no apuntó intencionadamente contra civilesdurante la contienda, que se cobró cerca de 2.200 muertos del lado palestino, en su mayoría civiles, según la ONU.