La Policía israelí, que controla la seguridad en Cisjordania, informó que en Kufur Mughayyir, cerca de la capital palestina, Ramallah, una mezquita fue incendiada en horas de la madrugada en un suceso que está aún bajo investigación.

"Esta madrugada recibimos información acerca de la quema de una mezquita (...) Las fuerzas de la policía contra la violencia nacionalista y el Ejército no han podido entrar aún para abrir una investigación por los desórdenes que tienen lugar en la zona", afirmó la Policía en un comunicado.

Se trata de una aldea en la que hay fuertes fricciones entre la población palestina y los colonos judíos, por lo que la investigación apunta a que detrás del suceso hay ultranacionalistas judíos.

Feligreses que acudieron a la mezquita en el primer llamado de las 4.30 (23.30 de Argentina) descubrieron el incendio en la primera planta y acusaron a los colonos judíos de la zona de haberlo provocado.

"Cada vez que la mezquita es quemada, la ocupación (israelí) lleva a cabo una investigación para mostrar que hace algo, pero nunca arrestó a un solo colono", se quejaron los residentes y aseguraron que no es la primera vez que el lugar es blanco de ataques de colonos.

El incendio causó graves daños a la primera planta y de menor cuantía a la segunda.

Los ataques contra mezquitas e iglesias fueron frecuentes entre 2013 y principios de 2014, y las autoridades acusan de ellos a extremistas judíos que en muy pocos casos fueron detenidos.

En otro suceso, ocurrido en la madrugada del martes y revelado hoy, presuntos extremistas judíos pincharon las ruedas de cinco coches en Bet Tzafafa, una aldea palestina situada entre dos barrios judíos en la parte sur de Jerusalén.

Allí los autores dejaron la pintada de "No hay autos, no hay árabes".

En el segundo de los incidentes de la pasada madrugada, desconocidos arrojaron un cóctel molotov contra la antigua sinagoga de Shfaram, en Galilea y donde actualmente reside una población mixta de árabes, beduinos y drusos.

La sinagoga, que data de hace 250 años y que seguía en uso durante la primera mitad del siglo XX por la pequeña comunidad judía que residía allí, se convirtió en mayo pasado en un símbolo de convivencia cuando jóvenes árabes de la ciudad la pintaron y limpiaron en una iniciativa conjunta contra el odio y la intolerancia.

El ataque de hoy causó daños leves en el exterior de la sinagoga, dijeron fuentes del poblado.

En una rueda de prensa, el ministro de Ciencia y Tecnología, Yaacov Pery, ex jefe de los servicios secretos, condenó el ataque "en nombre de todo el gobierno israelí" y aseguró que los responsables de ambos ataques "serán llevados ante la ley".

"Son tiempos preocupantes. Somos testigos de una seria escalada de la violencia y del terrorismo, que supone un verdadero peligro a judíos y árabes por igual", declaró ante los periodistas.