Hungría declaróel "estado de emergencia" inmigratoria y el Parlamento aprobó un paquete de leyes muy restrictivas contra los refugiados, en medio de la crisis que azota a toda Europa ante la llegada de miles de sirios por la guerra en su país.

La tensión aumentó en las últimas horas en Hungría ante el impedimento de que los refugiados puedan viajar hacia Austria en tren.

Por eso, cientos de inmigrantes que estaban varados en la estación de trenes de Budapest comenzaron a caminar los 240 kilómetros que los separa de Viena.

Las autoridades húngaras rechazaron con distintas medidas que los refugiados procedentes de Siria viajen a Austria y Alemania. En paralelo, insisten en su pedido para que los inmigrantes se registren y acepten asilo allí.

Según un paquete de leyes aprobado por el Parlamento húngaro, cruzar la frontera a Hungría de forma ilegal constituirá un acto criminal.

Las leyes contemplan también también hasta 20 años de cárcel para los traficantes de personas. Además se contempla la creación de zonas de tránsito para los refugiados directamente junto a la frontera.