A pedido de Bagdad, aviones de Estados Unidos y Francia han estado bombardeando posiciones del EI en Irak, y otros 40 países ya han prometido armas, asesores militares y ayuda humanitaria para enfrentar al grupo ultraintegrista, que controla extensos territorios en Irak y en Siria, como aporte a la coalición.

Pese al rechazo del gobierno sirio, el gobierno del presidente estadounidense, Barack Obama, también planea bombardear objetivos del EI en Siria y entrenar a unos 5.000 rebeldes sirios en Arabia Saudita para luchar contra los islamistas.

Tanto el EI como los rebeldes armados por Estados Unidos buscan derrocar al presidente sirio, Bashar Al Assad, desde 2001.

En un mensaje grabado difundido hoy por páginas de internet, el vocero del EI, Abu Mohamed al Adnani, dijo que la coalición no será capaz de destruir a los yihadistas y que las naciones de la coalición pagarán un "alto precio" por atacarlos.

"Ataquen a los soldados, patrones y tropas de los que superan los lí­mites marcados por Alá. Ataquen a sus policías, agentes de seguridad y de inteligencia, así­ como a sus traidores agentes. Destruyan sus camas, amárguenles las vidas y ocúpensese de ellos", señaló el portavoz.

"Si pueden matar a un infiel americano o europeo, especialmente a los vengativos y sucios franceses, o a un australiano, un canadiense o cualquier infiel de los que promueven la guerra infiel, incluidos los ciudadanos que entraron en la coalición contra el Estado Islámico, confí­en una vez más en Alá y mátenlos del modo que sea, pero háganlo", enfatizó.

Conocida la amenaza yihadista, el gobierno de Francia dijo que no cejará en su propósito de combatir al grupo aunque llamó a sus ciudadanos en el extranjero a estar alertas.

"Francia no tiene miedo porque está preparada para responder a estas amenazas", dijo el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve.

"Las amenazas no cambiaran nuestra determinación de socorrer a las poblaciones perseguidas y eliminar el riesgo que representa EI para nuestra seguridad", agregó el ministro ante periodistas.

No obstante, el canciller francés, Laurent Fabius, pidió hoy a una treintena de embajadas de su país que inviten a sus nacionales en el extranjero a aumentar su alerta.

Su Ministerio indicó en un comunicado que se ha solicitado a todos los franceses residentes en el extranjero o que se encuentren de paso que consulten de forma sistemática las recomendaciones de seguridad colgadas en su página web.

Desde París se recomendó también a los franceses residentes "en los países afectados" a registrarse en el consulado más cercano, y a los que se encuentren de paso en esas zonas se les pidió que se inscriban a través de Internet.

Denis Bauchard, consejero para Medio Oriente del Instituto de Relaciones Internacionales francés, dijo al diario Le Figaro que la amenaza era "una consecuencia lógica de los ataques aéreos" en Irak y que "debe ser tomada muy seriamente".

Cazeneuve recordó que el plan antiterrorista nacional Vigipirate se encuentra funcionando al máximo, pero reconoció que el "riesgo cero de atentados no existe".

Le Figaro, en una encuesta en su sitio web, reveló que el 80% de los franceses temen que un ataque terrorista tenga lugar en su país.

El EI, una escisión de la red Al Qaeda, proclamó este año un califato en las parte de Irak y Siria bajo su control e instauró allí una versión extrema de la ley islámica, asesinando a todos aquellos miembros de minorías religiosas que rehúsen convertirse.

En represalia por los ataques de Estados Unidos y la participación del Reino Unido en la coalición, el grupo decapitó el último mes a dos periodistas estadounidenses y a un rehén británico y amenazó con asesinar .

"Conquistaremos su Roma, romperemos sus cruces, esclavizaremos a sus mujeres con el permiso de Alá, el Elevado", aseguró el portavoz del EI en el mensaje.