El Consejo de Seguridad de la ONU hizo un llamamiento para "el inmediato cese de hostilidades" en Gaza y expresó su "seria preocupación" por la escalada de violencia en la Franja, después que el sábado 62 palestinos y trece soldados murieron por el ataque israelí al barrio gazatí de Shahaiya. 

El presidente de turno del Consejo de Seguridad, el ruandés Eugene Gasana, formuló el pedido de cese de hostilidades en una declaración que leyó a los periodistas después de una reunión de alrededor de dos horas en la que se analizó la situación en esa región de Oriente Medio. Gasana aclaró que la declaración que leyó ante los periodistas fue convenida por los representantes del Consejo de Seguridad después de las consultas realizadas en una reunión a puerta cerrada en la sede de la ONU. "Los miembros del Consejo de Seguridad expresan su seria preocupación por la escalada de la violencia relacionada con Gaza", dice la declaración.
 
Además, ese órgano de la ONU hace un llamamiento para "el respeto de las leyes humanitarias internacionales, incluyendo la protección de los civiles", a la vez que insiste en la necesidad de alcanzar treguas entre las dos partes por razones humanitarias.  También expresa su "seria preocupación" por el creciente número de ví­ctimas y dice que la petición para un alto el fuego debe basarse en los convenios firmados en noviembre de 2012 que permitieron el cese de hostilidades en Gaza. En ese sentido, el Consejo de Seguridad, de acuerdo al texto que leyó Gasana, agradece los esfuerzos de Egipto para que el movimiento palestino Hamas e Israel alcancen un alto el fuego, labor en la que está siendo apoyado por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon. 

Ban se encuentra de gira por Oriente Medio con el fin de impulsar con lí­deres regionales un alto el fuego, después de que se viviera en Gaza la jornada más violenta de los últimos dí­as, con 62 palestinos y trece soldados muertos por el ataque israelí­ a Shahaiya. Ban, desde Qatar, donde se encontraba el domingo, volvió a condenar la violencia de la ofensiva israelí­ contra Gaza, e hizo renovados llamamientos para un alto el fuego. 

En este marco, al menos nueve palestinos, siete de ellos niños, todos de la misma familia, murieron hoy en un ataque israelí­ contra una vivienda en la localidad de Rafah, en la frontera con Egipto, informaron fuentes médicas de la Franja. Con estas nuevas muertes, son ya al menos 502 los palestinos, en su gran mayorí­a civiles, los que perecieron en ataques y bombardeos en Gaza desde el inicio el pasado 8 de julio de la ofensiva bélica israelí­ contra la Franja. 

Alrededor de 140 murieron solo el domingo, en la jornada más sangrienta en la que también perdieron la vida 18 soldados israelí­es. Trece de ellos perecieron el mismo domingo en tres escaramuzas y un ataque con bomba contra uno de los carros blindados con los que Israel entró en Gaza. 

El portavoz de emergencias de la Franja, Ashraf al Qedra, dijo también que 72 personas perdieron la vida el domingo en los intensos bombardeos por tierra, mar y aire de Israel sobre el barrio de Shahaiya, escenario de una verdadera masacre. Además, Al Qedra reveló que los servicios de emergencia sacaron de los escombros 16 cadáveres de un edificio atacado la tarde del domingo en la localidad meridional de Jan Yunis, en el que ya se habí­an contabilizado nueve muertos.