En el primer día de los funerales oficiales que concluirán mañana, cientos de miles de personas acompañaron bajo la nieve en Pyongyang el cortejo fúnebre del fallecido líder de Corea del Norte Kim Jong-il, durante el cual su hijo Kim Jong-un se exhibió como sucesor y nuevo líder.

Kim Jong-un, el hijo menor, acompañó el coche fúnebre al cruzar la plaza situada frente al mausoleo. Según los analistas, se trató de una muestra más de que el joven afianzó su posición en los últimos días, tras la muerte de su padre.

Kim Jong-un estaba acompañado por militares de alta graduación, entre ellos su tío Jang Song taek, en quien muchos analistas ven al futuro regente del régimen hasta que el "gran sucesor" asuma las riendas del país comunista.

Ahora, todos los analistas tienen la puesta vista en los movimientos de Kim Jong-un para fortalecer su posición en el partido comunista y el Ejército.

Por el momento, la prensa oficial norcoreana lo describió como un dirigente del Comité Central del partido, en lo que parece un paso más para asegurar su posición como líder máximo al frente del país.

Kim Jong-un, es el líder "supremo del Estado, del Partido y del Ejército" norcoreano, rezó la terminología usada hoy por los medios de su país durante los funerales del "Querido líder".

El funeral comenzó en el mausoleo de Kumsusan, donde se encontraba el cuerpo en un féretro de cristal desde el día de su muerte, el 17 de diciembre.  Desde allí partió el coche con el ataúd, decorado con crisantemos que simbolizan la muerte y una bandera del partido, que lo trasladó por la ciudad precedido por otro vehículo que portaba una enorme fotografía de un Kim sonriente.