La Guardia Civil de la capital española tiene como principal línea de investigación que la mujer fue asesinada en el domicilio que alquilaba en la zona de Majadahonda, en el oeste de la ciudad, y luego descuartizada y sus restos trasladados a algún vertedero.

Un vecino relató ver al dueño de la vivienda donde residía la mujer, cuya identidad aún no fue suministrada, saliendo de allí con varias bolsas de basura, pocos días antes de que la familia denunciara su desaparición, lo que sustenta esa hipótesis.

No obstante no se descartan otras, según la Comandancia, que continúa investigando.

La familia de la mujer, de 55 años, denunció su desaparición el 6 de abril pasado y, tras recabar varios testimonios, la Guardia Civil detuvo a su casero, un ciudadano español de 30 años.

Este hombre, que incurrió en contradicciones durante los interrogatorios policiales, fue puesto a disposición judicial y luego enviado a prisión.