El periodista Pablo Medina, corresponsal del diario ABC Color en Curuguaty, 250 kilómetros al noreste de Asunción, murió hoy acribillado a balazos por dos sicarios presumiblemente del narcotráfico, según las autoridades.

El ministro del interior, Francisco de Vargas, informó que el fallecido recibía frecuentes amenazas de los narcotraficantes.
"Pablo Medina fue objeto de varias amenazas, sobre todo por sus denuncias sobre la producción de marihuana en la zona", expresó el ministro.

En efecto, Curuguaty está ubicado entre las localidades cercanas a la frontera con Brasil en cuyos bosques se produce la mencionada hierba y que suele generar violentos incidentes entre clanes de narcotraficantes.

Medina recibió varios balazos dentro de su automóvil, y una de las dos mujeres que le acompañaban en el momento del ataque también falleció a consecuencia de las heridas recibidas.

En 2000 también fue asesinado a balazos su hermano Salvador Medina, quien trabajaba en una radio comunitaria de la zona y también recibía amenazas anónimas antes de su muerte.

Pablo Medina regresaba de una cobertura periodística cuando fue atacado por los sicarios, informó el diario en el que prestaba sus servicios el fallecido.

Según publicó el mismo diario en noviembre del 2010, una de las amenazas que recibió Medina provino del intendente de Ypehú, una localidad cercana a Curuguaty, tras informar el corresponsal sobre una lucha de clanes de traficantes de marihuana, en uno de los cuales figuraba la mencionada autoridad municipal.

Compañeros del periodista fallecido y de otros medios realizaron una manifestación de protesta frente a la Comandancia de la Policía Nacional.