El ministro de la Corte Suprema Eugenio Raúl Zaffaroni presentará a partir del 6 de abril en la Televisión Pública el ciclo de 10 películas que compone el renombrado decálogo, basado en los 10 mandamientos, del realizador polaco Krzysztof Kieslowski. Será los sábados a las 22, e incluirá interpretaciones del prestigioso jurista sobre la implicación filosófica de la célebre miniserie de unitarios de la televisión polaca, que consagró al director de la triglogía “Rouge”, “Blue” y “Blanc”.

El Decálogo se filmó en los últimos años del régimen comunista polaco, poco antes de la caída del Muro de Berlín. Las exposiciones de Zaffaroni constarán de una exposición inicial de más o menos cinco minutos y una reflexión final de once o doce minutos.

Por Continental, el ministro del máximo tribunal aclaró que tendrá “una mirada completamente sesgada”, desde “una perspectiva diferente de la obra de Kieslowski, conjunto del que sólo había visto dos o tres episodios”.

“Creo que El Decálogo sigue teniendo vigencia, porque en un sentido hegeliano sigue planteando las mismas preguntas, quizás pueda perder vigencia la forma de preguntar, la forma de interrogación, básicas, de límite metafísico, ontológico, lo digo un poco de pasada, no obstante meterme con eso aburriría al público”, explicó en La Mañana.

“Kieslowski pone en duda permanentemente. Hegel plantea las preguntas básicas de tiempo, de vida, de existencia, de límites metafísicos. Lo que veo en él es a un filósofo que trata de plantear los problemas de toda la vida, de una forma artística de hacer preguntas filosóficas, sobre todo en las que apuntan a la normativa ética”, sintetizó.

Para el penalista, “el sentido literal de la norma, en un determinado contexto anómalo tiene otro sentido, y ese es el eje principal de esta obra de Kieslowski, es decir la puesta en duda de la norma, como desentrañar el sentido del mandato en otro contexto; cuando lo imaginamos es de una forma, pero, en determinado contexto, si cumplo la letra, traiciono el mandato. No es sencillo”, graficó.

Finalmente, Zaffaroni aclaró que es cinéfilo, pero sólo con films “de viejos tiempos, de las décadas del 60 y 70, Ingmar Bergman, entre otros. No tengo mucho tiempo como para poder ir al cine”, admitió.