En los últimos días un sinfín de especulaciones comenzaron a sonar en diferentes medios de comunicación sobre la visita de Diego Maradona al programa de Susana Giménez. Pese a que todo indicaba que el astro del fútbol iba a estar sentado en el living de la diva, algo sucedió que cambió el rumbo de las cosas y que generó el enojo de la conductora.

"Yo levanté al programa porque me sentí manoseada. Sentí que había hecho un arreglo, que tenía a Maradona como invitado y después me dijeron: 'no'. Y yo dije: '¿cómo no?'. Esto no es serio", confesó Susana ante distintos medios que la esperaron arribar desde Uruguay..

Luego, fue clara al explicar quiénes habían sido los causantes de su malestar. "Me sentí manoseada por el canal, por la interna del canal. No me pueden decir que si, que hay una cosa y que yo acepte porque también había una situación con Diego", sostuvo.

Y sobre su relación el Diez, aseguró que nunca tuvo ningún conflicto con él. "Yo no hablé con Diego pero sé que me mandó un ramo de flores a casa. Las relaciones con él nunca estuvieron mal, por lo menos de mi parte. Diego es muy especial, a veces se ofende, no se por qué. Me acerqué a hablar así se termina, si no me siguen", manifestó.

Y agregó: "A Maradona no le voy a decir nada, ¿qué le voy a decir?, que lamento mucho lo que pasó con el programa, yo no tengo nada que decirle". Más tarde, se refirió a las polémicas declaraciones que hizo al asegurar que Maradona para ella "estaba muerto": "En ese momento estaba, ahora resucitó porque yo estaba enojada pero levantó la denuncia. Yo no tengo idea de la parte del dinero, tengo un presupuesto del canal para mi programa pero yo no lo manejo", contó.

Por último, Giménez explicó que este episodio fue el único en toda su carrera artística. "Es una decisión que tomé después de 35 años de carrera. Yo soy muy profesional y nunca lo hubiera hecho pero todo tiene un límite. Por supuesto que sigo con el programa, esto fue una cosa que pasó", concluyó.