La ex primera bailarina del American Ballet Theatre bailará su última pieza sobre el escenario de nuestro primer coliseo, poniéndose en la piel de Julieta en cuatro funciones programadas los días domingo 11 de octubre a las 17:00 horas y martes 13, jueves 15 y sábado 17 de octubre a las 20:00 horas, acompañada por el primer bailarín español del New York City Ballet Gonzalo García.

Con versión coreográfica de Maximiliano Guerra, director del Ballet Estable, esta producción del Teatro Colón contará con la dirección musical de Emmanuel Siffert al frente de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires.

En la función del miércoles 14 de octubre a las 20:00 horas, la pareja protagónica estará compuesta por Karina Olmedo y Dalmiro Astesiano mientras que en la presentación del viernes 16 de octubre a las 20:00 horas serán Nadia Muzyca y Federico Fernández quienes interpretarán a los amantes de Verona.
 
Paloma Herrera se graduó en el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón. A los 15 años fue contratada por el American Ballet Theatre, compañía de Ballet Oficial de EEUU, siendo la artista más joven en alcanzar, a los 19 años de edad, el máximo rango de Principal Dancer de la compañía, en sus 75 años de la historia. Como primera bailarina del American Ballet Theatre, ha girado por todo el mundo. Además, fue Estrella Invitada de compañías tales como el New York City Ballet, el Tokio Ballet, el Kirov Ballet de San Petersburgo, el Kremlin Palace Ballet, el ballet del Teatro Alla Scala de Milán, entre otros. La revista Dance Magazine, la más acreditada del mundo, destacó a Paloma Herrera entre los 10 Bailarines del Siglo. 

La historia…

En Romeo y Julieta, dos jóvenes enamorados, de dos familias enemigas, son víctimas de una trágica historia de un amor que nace imposible y, acompañada de una serie de malentendidos y acontecimientos guiados por el azar y la fatalidad, acaba con la muerte de los protagonistas.  

Con música de Serguei Prokofiev, el ballet se estrenó en 1938 en Brno, Checoslovaquia, donde fue muy bien recibido. Le siguieron el estreno ruso en 1940 en el Kírov, y en 1946 en el Bolshói. Es una de las obras más apreciadas del compositor, en base a la alta inspiración melódica, la gran variedad rítmica y el carácter memorable de los temas principales.

Las localidades pueden adquirirse desde 65 pesos. Para mayor información se puede ingresar a www.continental.com.ar


Fuente: Martín Leopoldo Díaz