"El primer grado fue un año conmovedor porque fue de desarraigo con mi familia. Tenía doble escolaridad y me quedaba de pupilo en el colegio. Me cargaron con responsabilidades, pero hubo un momento que me sacó de eje y nunca lo conté porque tenía miedo de que mi papá fuera y asesinara al cura", reveló Ventura.

"Fue un sacerdote que tuve en primer y tercer grado", prosiguió el periodista. "Un día me mandó a buscar algo al aula, entró tras de mí y me dijo: 'A ver Ventura, venga'. Había una tarima de madera y me paré ahí", relató el entrevistado.

"Me hizo preguntas, comenzó a bajarme el pantalón y después el calzoncillo. Me quedé paralizado por la vergüenza que me daba estar desnudo frente a otra persona. En determinado momento él con su boca me tomó el pito. Y debe haber pasado algo o vino alguien o yo lo asusté por los nervios".