El volante de San Lorenzo Pablo Barrientos confesó que el gol que le marcó desde más de 49 metros a su ex equipo, Estudiantes, en el propio estadio Ciudad de La Plata, fue "el más lindo" de su carrera, y que además nunca había anotado "desde tan lejos".

Barrientos, que está atravesando por su tercer ciclo en el "Ciclón", tuvo un breve paso por Estudiantes en 2011, donde anotó tres goles. Será por eso que el de esta noche lo gritó con todo. Aunque en realidad, por la concepción y la belleza, merecía un festejo, aunque la víctima haya sido su ex compañero Agustín Silva.

Otro que también celebró en grande, sobre todo después del gol perdido la semana anterior frente a Corinthians, de Brasil, por Copa Libertadores, al fallar un cabezazo de frente y a tres metros del arco, fue el ex volante de Lanús Sebastián Blanco, que anotó el primer tanto de su equipo en el 2-0 sobre Estudiantes y también el primero con la camiseta azulgrana.

"Fue un partido difícil, porque no es sencillo ganar en La Plata, y además era un triunfo necesario porque veníamos de dos derrotas seguidas en casa", reconoció Blanco, que sumó también el traspié ante San Martín, de San Juan, por el torneo local.

"Es importante haber marcado mi primer gol con esta camiseta porque sirvió para ganar, pero ahora por suerte hay una semana larga para preparar el clásico con Huracán del próximo domingo en nuestra cancha, donde sería muy importante ganar ante nuestra gente", concluyó.