"El acceso a esa fase de la Libertadores debe decidirse en una cancha de fútbol y no en otro lugar. Cuando se fije la fecha, Boca estará ahí para jugar", expresó Martucci en diálogo telefónico con medios televisivos, en alusión a una de las polémicas que se generaron en las últimas horas.

La realización o no del partido desempate entre Boca y Vélez para definir un lugar en la próxima Libertadores quedará definida el jueves próximo en la Asamblea Extraordinaria de la AFA, algo que quedó determinado ayer por la tarde.

El presidente de Vélez, Raúl Gámez, solicitó al Comité Ejecutivo un cuarto intermedio para explicar la posición del club de no jugar el desempate, y eso fue lo que dilató la decisión.

Gámez asegura que Vélez está clasificado para la Libertadores y que no debe jugar un desempate ante los 'Xeneizes' y amenazó con no presentarse a jugar el encuentro.

Martucci se refirió también a otros temas, como la inminente incorporación de Pablo Pérez, actualmente en el Málaga de España, el interés por Milton Casco, de Newell's Old Boys, y le puso paños fríos a la posible llegada del arquero Guillermo Sara, ex Atlético de Rafaela y Betis de España.

"Pérez está muy cerca, solo restan detalles, y Casco es un jugador que interesa. En cuanto a Sara, no es prioridad de Boca reforzar el puesto de arquero, existen otras prioridades", añadió Martucci.

El dirigente se refirió finalmente a Juan Román Riquelme y las declaraciones que formuló ayer en presidente del club Daniel Angelici en cuanto a que durante lo que resta de su gestión (finalizará su mandato en diciembre del año próximo) el crack no regresará al club.

"Creo que Angelici fue muy explícito con sus palabras, sucede que este año los resultados no acompañaron y entonces la gente pidió su regreso, pero yo no sé si Riquelme tiene la voluntad de volver a Boca", concluyó el directivo.