Perú integrará el Grupo C de la Copa América que comenzará en el mes de junio en Chile. Se las verá con Brasil, Colombia y Venezuela, con poco tiempo de reconocimiento para con el cuerpo técnico y preparación para la trascendental cita. Aunque más allá de que Ricardo Gareca, quien firmó por cuatro años con la Federación incaica, toma en serio la competición del otro lado de la Cordillera, tiene muy en claro que el objetivo primordial de su ciclo será la clasificación al Mundial de Rusia.

Serán cuatro años largos y duros, porque la jerarquía de varios conjuntos nacionales sudamericanos creció y hay varios cucos que restan las chances de países con menor experiencia como Bolivia, Perú y Venezuela. Por eso mismo es que el "Tigre" toma cartas en el asunto y yamantuvo diálogo con la Federación "albirroja", con el fin de intentar mudar la localía a la altura, una cuestión extrafutbolística que siempre perjudica a los elencos acostumbrados al buen fútbol en el llano. ¿Sacará ventaja?

Históricamente, la Selección de Perú hizo las veces de local en el estadio Nacional de Lima, aunqueexiste la posibilidad de que Cuzco sea su escenario a lo largo de las Eliminatorias 2018. La cancha en la cual se presentan cotidianamente Deportivo y Real Garcilaso, que albergó un encuentro por la Copa América 2004 (el tercer puesto entre Colombia y Uruguay) es el Inca Garcilaso de la Vega, que fuera remodelado en vísperas del mencionado certamen y posee una capacidad de 43.000 espectadores.

En el prontuario de este estadio que está situado a 3.400 metros del nivel del mar figura una histórica goleada en contra de Boca, por la fase de grupos de la Copa Libertadores 2007, que finalmente terminaría alzando ante Gremio. Si la CONMEBOL levanta el pulgar (los únicos autorizados a jugar por encima de los 2.750 metros son Bolivia, Colombia y Ecuador), entonces habrá otro 'alto fantasma'.