El diario domincal The Sunday Times publicó que el Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido accedió a datos secretos, que avalarían las especulaciones de una manifestación por parte de los deportistas sudamericanos.


Este año se ha cumplido el trigésimo aniversario de la guerra que enfrentó a ambos países por la posesión de las islas Malvinas.



El Gobierno inglés está preocupado sobre la posibilidad de que haya expresiones argentinas similares a la que hicieron deportistas afroamericanos en los Juegos Olímpicos de México 1968 en una ceremonia de entrega de medallas.



En esa ocasión, los estadounidenses Tommie Smith, medalla de oro en 200 metros, y John Carlos, de bronce, levantaron el puño, no llevaban calzado y se pusieron medias negras para representar la pobreza. Ese acto inmortalizó el saludo del "Black Power". Tras la "indisciplina" de los corredores, el Comité Olímpico Internacional los expulsó de la cita.



Según The Sunday Times, Londres teme que cualquier gesto por parte de los argentinos sea difundido por los medios de todo el mundo, "lo que profundizaría aún más la ya tensas relaciones entre los dos países a raíz del conflicto de las islas del Atlántico Sur".



"Estamos preocupados porque Argentina aproveche los Juegos Olímpicos para protestar por las Falklands (como llaman los británicos a las Malvinas) y estamos mirando lo que podemos hacer. Parecen determinados a presentar su caso ante cualquier oportunidad", declaró al rotativo una fuente del Foreing Office.



La semana pasada, el primer ministro británico, David Cameron, fue abordado por la presidente argentina, en la cumbre del Grupo de los Veinte (G20, países desarrollados y emergentes) celebrada en México. En esa ocasión, Fernández trató de entregarle a su par un sobre con unos documentos relacionados con el reclamo de soberanía, pero el inglés se negó a aceptarlos.



Según la información del dominical, el Comité Olímpico Internacional (COI) ha indicado que hay reglas muy estrictas sobre los uniformes de los atletas y ha asegurado que los deportistas argentinos no llevarán símbolos políticos. Sin embargo, el Gobierno está preocupado por que uno o más atletas puedan hacer algún tipo de protesta.



Recientemente, Londres expresó su descontento por la difusión en el país sudamericano de un vídeo, grabado en secreto en las islas, en el que se veía a un atleta entrenando en las Malvinas. Al final de la filmación, el mensaje decía: "Para competir en suelo inglés, entrenamos en suelo argentino".



Ante las tensiones entre los dos países, el Gobierno de las islas Malvinas anunció recientemente que el año próximo celebrará un referéndum para decidir su futuro político. Los isleños se niegan a cualquier diálogo con Buenos Aires que implique hablar sobre la soberanía.