El ministro de Economía, Axel Kicillof, denunció que “se está gestando un escenario donde en enero va a ocurrir algo que depende de los fondos buitre y no del Gobierno”, y reiteró que “la Argentina mantiene siempre la misma política” con relación a la renegociación de la deuda con los holdouts. “Estamos defendiendo el canje de deuda que tuvimos con el 93% de aceptación contra un grupo minúsculo que tiene una intencionalidad política con determinados intereses y que quiere tirar abajo el canje”, dijo Kicillof desde Aeroparque donde ofreció una conferencia de prensa junto al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, antes de viajar a Brasil donde sostendrá reuniones bilaterales.
 
En ese contexto, señaló que “el problema central de la deuda externa es que los buitres no quieren arreglar”, y sentenció que estos fondos “lo que quieren es tirar abajo el canje” de deuda. “No han querido aceptar ninguna oferta del gobierno” argentino. Si la Argentina hubiese pagado el fallo a favor de los buitres, “habríamos tenido una catarata” de juicios en el juzgado de Thomas Griesa. “Lo que hacemos es defender la formidable reestructuración de deuda”, fundamentó.
 
También fustigó a quienes pretenden “instalar que la inflación es del 40 por ciento” y sostuvo que, “incluso observando consultoras con metodologías que son mezcla de mística, chantería y oscuridad, ninguna de ellas siquiera da esos valores. La cuestión tiene que discutirse con seriedad. Hay mucha intencionalidad política y el propio periodismo debería hacerse eco de la discusión en torno a la seriedad de esas consultoras”, consideró Kicillof al definir como un “mamarracho absoluto” el índice de precios difundido en el Congreso por sectores de la oposición.