En conferencia de prensa en la Usina del Arte del porteño barrio de La Boca, y al cabo de una reunión que duró casi dos horas, Moyano se refirió a las próximas paritarias y afirmó que "la discusión salarial es libre o no hay discusión, por lo menos los gremios privados no lo aceptarán”.

Al responder a los periodistas, Moyano reconoció que en el pasado tuvo diferencias con Macri, igual que con dirigentes de otras fuerzas, pero dijo que eso no es un obstáculo para que dialoguen y destacó que el actual Gobierno porteño “le ha dado a los trabajadores de la Ciudad mucho más que el Gobierno nacional”. Por su parte, Macri, quien buscó exhibirse como el convocante, volvió a cargar contra el Gobierno y agregó: "Los que tenemos canas sabemos el daño que hace la inflación".

Sin embargo, se expresó la diferencia que hay entre ambas partes con respecto a la visión del sindicalismo, más allá del agradecimiento de Moyano y Barrionuevo a Macri por “aceptar encontrarse para escuchar los reclamos”. La encargada fue la senadora Gabriela Michetti (única oradora del Pro además de Macri), quien según uno de los testigos de la mesa de trabajo, señaló: “Nosotros tratamos de hacer un cambio en la política pero cuánto están dispuestos ustedes a ir con la renovación y democratización de los sindicatos”.

“Le saltaron a la yugular a Michetti”, describió un macrista de paladar negro: “Varios de los gremialistas, entre ellos (Julio) Piumato, tomaron la palabra para responderle y le dijeron que la renovación no era un tema importante en este momento y que ellos ya tenían algunos proyectos para conversar. Le dijeron que no se equivocara, que ya a (el ex presidente Raúl) Alfonsín le había pasado creer que el problema eran los sindicatos peronistas y resulta que fue contra el movimiento obrero y de ahí no le vino el ataque”, ironizaron en lo que algunos interpretaron como una advertencia.

Antes de la reunión, Macri dijo en declaraciones públicas que hay que “profundizar el diálogo con todos, especialmente con los trabajadores” y llamó a “construir la Argentina que viene con el diálogo social como elemento fundamental”. El jefe de Gobierno accedió a realizar la convocatoria por idea de su asesor Marcos Peña, y ordenó la organización del encuentro al senador Diego Santilli, de aceitados vínculos con el moyanismo. También acompañaron a Macri el jefe de Gabinete Horacio Rodríguez Larreta, los diputados Laura Alonso, Miguel Del Sel, Héctor Baldassi y Patricia Bulrrich, mientras que por el lado gremial también estuvieron Gerónimo “Momo” Venegas y Juan Carlos Schmidt, entre otros.

Por Continental, el jefe del bloque de diputados del PRO, Federico Pinedo, afirmó que “es necesario reconstruir el diálogo social ante un Gobierno cerrado” para justificar el cónclave entre dos líderes como Moyano y Macri, que siempre se enfrentaron ideológica y discursivamente. "Ayer encontré la voluntad de todas las partes de reiniciar una iniciativa de la iglesia y la ONU en 2001 que es el diálogo social. Ha empezado una nueva ronda con la CGT disidente para analizar el tema de la producción y el trabajo pero también otros temas que generan muchísima preocupación como la inseguridad y el narcotráfico", ponderó en De 6 a 9 con Paulino.