La orden del juez Gabriel Vera ultimaba a los vecinos de la Villa 20 abandonar el predio que usurparon en Villa Lugano pero la medida nunca se concretó. Decenas de agentes de la Policía Metropolitana se desplegaron con sus camionetas y formaron vallados humanos. Sin embargo, lo que parecía ser un mega operativo -con consecuencias impredecibles ante la resistencia de los okupas- quedó disuelto minutos más tarde, cuando los agentes se retiraron pacífica y paulatinamente, sin siquiera poner en marcha ninguna misión concreta. 

Unas 500 familias permanecen en el lugar, con el apoyo de varios legisladores de izquierda que durante la tarde elevaron un petitorio a la justicia competente para un 'cuarto intermedio' que frenase el despeje compulsivo de los terrenos en disputa.

"Por decisión del juez, se suspendió el desalojo porque no estaban las condiciones dadas para concretarse. Estamos abiertos al diálogo, cada vez que el juez lo requiera", afirmó la Ministra de Desarrollo Social de la Ciudad de Buenos Aires, Carolina Stanley, quien se hizo presente en el lugar, tras el retiro de Metropolitana.

Asímismo, expresó que seguirán "esperando la salida pacífica", pero aclaró que "la usurpación no es el camino para conseguir viviendas y terrenos".