La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) opositora realizará el próximo jueves un paro nacional con movilización a la Plaza de Mayo en reclamo de mejoras laborales, como el pago de un bono salarial de fin de año a empleados y jubilados de 4000 pesos.

La movilización a la Plaza de Mayo se llevará a cabo a las 16, en el marco de una "jornada de lucha con movilizaciones en distintos puntos del país". La CTA que conduce el estatal Pablo Micheli exige un bono de Fin de año de cuatro mil pesos para todos los trabajadores; salario mínimo, vital y móvil de nueve mil pesos y aumento de emergencia para los jubilados.

Además, reclama la excepción del impuesto a las ganancias sobre el medio aguinaldo de fin de año. "La necesidad de volver a salir a la calle, nos pone en el desafío de seguir construyendo unidad de acción con otros sectores que, al igual que nosotros, ven que su salario se degrada con la inflación y con el injusto cobro del impuesto a las ganancias que cada vez perjudica a más trabajadores", justificó un comunicado de prensa de la CTA.

Remarcó que "2014 ha sido un año lleno de contradicciones para un Gobierno nacional que en el discurso dice una cosa, pero en la práctica hace otra". En tal sentido, puso como ejemplo "la sanción de la nueva Ley de Hidrocarburos que desde la CTA Autónoma, junto a otros sectores, se definió en llamarla ley del Saqueo del Petróleo de los argentinos".

En varias oportunidades, el gremialista había manifestado su intención de reclamar por el bono de fin de año para contrarrestar los efectos de la inflación. "La situación es bastante angustiante, particularmente en los trabajadores que tienen salarios más bajos y en el sector de los jubilados. Siempre para fin de año se ha reclamado la necesidad de una recomposición, mucho más en los últimos tiempos, y este año no va a ser la excepción", había dicho.

Ahora resta ver qué posición toma el líder de la CGT opositora, Hugo Moyano, quien ya se había sumado al pedido del bono hecho por Micheli. Incluso había sostenido que le solicitarán a todos los dirigentes gremiales que acompañen el reclamo, a pesar del rechazo del Gobierno. "La inflación ya ha absorbido los aumentos", consideró.