General Motors instrumentará desde junio un régimen de suspensiones para todos los trabajadores de la planta de Alvear, para hacer frente a la caída de ventas y de la producción de autos. Así lo confirmó el secretario adjunto de los gremio de los mecánicos (Smata), Antonio Milici, luego de la reunión que mantuvieron ayer con los directivos de la automotriz.

El representante gremial admitió que la suspensión de todos los empleados "es preocupante", pero explicó que la medida se adopta para evitar despidos; de esta manera -cree el sindicalista- la crisis "se irá rápidamente" y el ritmo laboral se normalizará.