Daniel Pollack, mediador nombrado por el juez Thomas Griesa, se reúne este mediodía con todas las partes para conciliar posiciones. En este contexto, la presidenta, Cristina Fernández, adujo que nuestro país “seguirá dialogando, pero en condiciones justas”. Reiteró que la Argentina no entrará en default y advirtió que no firmará “cualquier cosa” bajo presión. Y desafió a “inventar un nombre nuevo” para “el deudor que pagó y que alguien bloqueó”.
 
Por su parte, el fondo NML Capital, del Grupo Elliott, habría decidido cambiar de estrategia, con el objetivo de activar las negociaciones y avanzar con el cobro de su deuda. Por Continental, el economista Alejandro Pérez Escoda afirmó que “la Argentina no tiene un plan B y va camino al default”.

En La Mirada Despierta, destacó que, si el default se produce, “habrá una caída del empleo en más de cien mil puestos de trabajo. Las opciones se le van achicando a la Argentina. Está perdiendo un tiempo valiosísimo en un choque frontal, pensando que los bonistas estarían perdiendo tanto o más que la Argentina, un juego temerario y más que alocado para un país”.