El ministro de Planificación Julio De Vido comenzó a reunirse con intendentes de la provincia de Buenos Aires con el objetivo de bajar fondos de Nación para obras.
 
El intendente radical de Saladillo, Carlos Gorosito, amenazó con realizar una huelga de hambre si el gobierno nacional no le envía fondos para realizar obras públicas en su distrito, al tiempo que volvió a criticar al ministro De Vido por favorecer en ese aspecto solo a los municipios alineados políticamente con la Casa Rosada.

Enojado por quedar afuera de las reunione, Gorosito recordó que en 2009 fue a un acto de De Vido, convocado con más intendentes para "un importante anuncio". "Terminó el anuncio y De Vido se va. Yo me quedo adentro y pido hablar con el subsecretario de obras públicas, en ese entonces José López". A partir de ahí, según sus dichos, lo confundieron con un intendente oficialista y comenzaron a hacerle preguntas sobre las decisiones gubernamentales, hasta que se manifestó en contra de las candidaturas testimoniales. Paso siguiente le dijeron que López no iba a atenderlo y llegó Abel Fatala, hoy en el cargo de López.

"La conversación terminó mal porque me dijo que teníamos que estar alineados para ser bien atendidos. Me dijo que si no me alineaba con el gobierno nacional no había nada. Esto quiere decir que hay intendentes kelpers. ¿Me tengo que pasar al FPV para recibir obra pública? Los recursos no son de los gobernantes", se quejó.