Raúl Robín, presidente de Economías Regionales de la CAME, denunció por Continental que "la mayor parte" de las ganancias por productos primarios se la lleva el último eslabón, el comercial. "Hay muchos componentes dentro del precio, lo injusto es que un productor que está trabajando todo el año cuando lo va a vender no tiene garantizada rentabilidad en su precio. La otra injusticia (se comete) contra el otro extremo de la cadena, el consumidor, que paga un precio que no es razonable. Se debe fundamentalmente a los costos de transporte, fiscales, laborales, pero la mayor parte de esa diferencia se la lleva el formador de precios", resumió en La Hora del Campo.