“Chicha” Mariani no cree que el represor Miguel Etchecolatz pueda aportar información valiosa para encontrar a su nieta Clara Anahí. La fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo piensa que “lo que busca Etchecolatz es darme otra puñalada en el corazón. Es una manera más de torturar”.

Por Continental, se refirió en estos términos a la declaración del ex director de Investigaciones de la Bonaerense durante la última dictadura.

Etchecolatz aseveró que tiene elementos de prueba sobre la nieta de Mariani, secuestrada en noviembre de 1976. Por otra parte, se desvinculó de la desaparición de Jorge Julio López, testigo clave en el juicio por el que el represor fue condenado en setiembre de 2006. Sostuvo al respecto que es “víctima de un deliberado propósito, donde se me adjudica una responsabilidad penal por hechos que no conozco”.

En Magdalena Tempranísimo, Mariani recordó que “el fallecido comisario Sertorio, de La Plata, me había asegurado que la nena estaba viva”, pero que “cada vez que lo citó a la Justicia, negó todo”.

En otro orden, la fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo expresó su certeza de que “hubo una maniobra en el examen de ADN del caso Noble Herrera. No creo en los datos que surgieron tras el cotejo de las muestras de sangre”, enfatizó Mariani.